Who am I?

Algo difícil de saber, más aún cuando ni siquiera la persona de la que se habla conoce del todo la respuesta. Siempre he juzgado a las personas, no lo busco, simplemente lo hago. Debo dejar de hacerlo.

Alguna vez leí que mi peor enemigo es el mejor amigo de alguien. Lo que convertiría mi concepto de ella/él en algo erróneo para la otra persona. Algo complicado.

Siempre he tenido miedo de muchas cosas, generalmente quiero aparentar que no es así. A nadie le gusta demostrar miedo, lo cual no significa que no lo sientan. Tengo miedo de no encajar, tengo miedo de pasar desapercibido por la vida, tengo miedo de dar una mala imagen. De algún día arrepentirme de la persona que en la que me he convertido…

Me gustan las series de televisión, más aquellas que tocan temas profundos, que te hacen analizar la vida. Y vaya que me gusta hacerlo. Ayer precisamente me pasó, en este capítulo se le asignó un compañero de la clase a cada personaje para que llegara a conocer aquello que los demás no conocen.

Y me hizo pensar, sabes? Quizá no debería analizar tanto las cosas y disfrutar la persona que soy.

Me gusta cantar, jah! Y las personas que me conocen saben que no lo hago nada bien. Pero siempre traigo canciones en mi cabeza, así que sólo las hago salir en una terrible versión. Y esto va desde Where’s my mind de Placebo hasta Con los ojos cerrados de la Trevi.

También me gusta leer. Historias fantásticas y libros de liderazgo y esas cosas. Desde Guía de la grandeza, en el que se habla de cómo obtener el éxito y ser una mejor persona; hasta Las claves del Poder, en el que se habla de cómo obtener este sin importar la persona en la que te conviertas. Contrastante, pero el fin es el mismo pues.

Nunca fui popular en la escuela. Y algunas veces me sentí mal por esto. Ahora sé que no importa, cuando esta acaba te das cuenta que los populares no tienen mejor vida que la tuya.

Cuando aún estudiaba tenía prisa por que esa etapa terminara, quería salir! Quería trabajar! Quería crecer…

El problema es que sales y lo que tienes no es suficiente, y buscas más y más. Y tu vida pasa demasiado rápido. Así va la mía, demasiado rápido. Estoy por cumplir 23. Y veo atrás, lo que he dejado, de lo que me he alejado; y sí, a veces se extraña.

Y es que se extrañan esos días en los que no se le daba mucha importancia a las cosas. Cuando disfrutabas haciendo el amor toda la noche con tu novia, dormías, despertabas y continuabas con la actividad; dormías, despertabas, comías y seguías entregándote. Cuando no pensabas en consecuencias. Cuando se amaba sin cuestionarse mucho.

No diría que he tenido mala suerte en cuanto al amor se refiere. Me he enamorado. He estado con personas maravillosas. Peleas terribles, reconciliaciones hermosas… Pero las cosas llegaron a un tope.

Una relación sin libertad no funciona, al menos no para mí. Me gusta sentirme libre. Creo que a todos nos gusta.

Me gusta ir a barecillos con música en vivo de mi agrado y tomarme dos o tres cervezas. Y ya que si traigo ganas de pegarme una borrachera, cosa que no me pasa seguido (No en mucho tiempo, que yo recuerde), lo hago. No por eso soy un alcohólico.

Fumo, sí, fumo. Dos cigarros al día, a veces menos. Y sí, yo sé que es malo. Pero lo hago. Quizá a veces creo que eso neutraliza esa imagen de niño bueno que algunas personas tienen de mi (Y que me molesta), quizá sólo lo hago por que estoy nervioso. Quizá por que puedo hacerlo. A eso llamo yo libertad. A tomar mis propias decisiones.

Y es lo que me disgusta y a veces pierdo en mis relaciones. Mea culpa. La libertad de tomar decisiones, aunque sea en cuanto a mi persona se refiere.

También me gustan las zucaritas, puedo sobrevivir alimentándome sólo con ellas. Aunque últimamente también he desarrollado algo de adicción por los sándwiches de jamón con aguacate. La verdad es que me da flojera cocinar. No me gusta la idea de pasarme gran rato metido en la cocina para terminar con el platillo en cinco minutos.

Aún no sé definir que tipo de persona soy, a veces me considero bueno, a veces malo; algunas veces víctima, otras verdugo. Creo que a todos nos pasa. Quizá es parte del ciclo de la vida. Del aprendizaje que tenemos que sacar de esta.

Espero con ansia mis 40 para ver la clase de persona en que me convertí. Sería genial hacerla de Hiro, viajar a esa época y ver si me agrada quien soy; y si no fuera así, regresar y hacer algo al respecto.

Pero diablos! Eso no es factible. Así que creo que tendré qué aplicar lo que dice Sharma y hacer de la suma de cada día algo bueno.

Mañana. Lo que espero con ansía es mañana verla cantar mientras busco en mi mesa el destello…

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(8) Your head will collapse, but there’s nothing in it. And you’ll ask yourself: Where’s my mind? (8)