Diario de un anónimo.

El domingo pasado decidí hacer algunos cambios en mi cuarto, darle algo más de color y organizar bien los tiliches que tengo. Primero me dispuse a sacar todo; cajas, tocador, cama, tele… en fin, todo. Y una vez despejado el cuarto, ahora sí a la barrida y trapeada.

Y ahí estaba yo barriendo donde minutos antes se encontraba la cama, cuando noté algo raro. Dos pisos estaban sueltos, casi en la esquina del cuarto, justo en el lugar que correspondía a mi cama. Me acerqué, retiré uno de ellos y cuál fue mi sorpresa al ver que bajo este se encontraba un viejo libro, algo empolvado y amarillento.

La curiosidad me invadía. Le eché un vistazo rápido a su contenido y me di cuenta que mi primera impresión había sido errónea, no era un libro, era un diario. Pero no veía el nombre del dueño por ningún lado…

…………………………………………………….
Viernes 16 de Noviembre

De nuevo es viernes, últimamente el tiempo ha pasado demasiado rápido, al fin tengo algo de tranquilidad en mi vida…

El recuerdo de ella ya no vaga más por mi mente, ahora tengo nuevos recuerdos.

Hace poco conocí a alguien, Nadia, 23 años, maestra de una primaria, delgada, muy simpática. Estuve saliendo con ella por un tiempo, pero conforme las citas pasaban me di cuenta que no encajábamos, había algo en ella que no me llenaba, y sin embargo seguí saliendo con ella…

El domingo pasado le pedí que habláramos, le dije que en este momento no tengo tiempo para una novia y tuve que aplicar la famosísima fase: No eres tú, soy yo.

La verdad es que no podía decirle simplemente que no había suficiente química entre nosotros.

Mis días son algo ajetreados, me levanto alrededor de las 4:00 a.m. para ir al trabajo, generalmente no alcanzo a desayunar, así que para las 12 ya estoy muriéndome de hambre. Mi día laboral termina como a las 4:00 p.m. A veces incluso más tarde.

A las 6:00 p.m. tomo un curso de inglés en un reconocido lugar de mi localidad, no tengo mucho que asisto ahí, pero me gusta mucho el ambiente. El primer día que fui noté que todos los maestros son muy jóvenes, algunos más que yo. Y de entre todos ellos, noté a una niña muy bonita, pelo negro y lacio, tez blanca y personalidad muy alegre. Sólo la vi, no pasó a más.

Conforme pasaban los días más me gustaba esta niña, sin embargo no me atrevía a hablarle, desde la prepa que una mujer no me ponía tan nervioso como lo hace ella.

Me fui haciendo amigo de mi teacher y poco a poco le iba sacando más información de Nohemí, al fin sé su nombre. También sé que odia el café y le encanta ir al cine, algo que me parece excelente. Pero lo mejor de todo, no tiene novio.

Hoy viernes fue el cierre del nivel cuatro, se suponía que iba a haber un convivio, así que pensé que era la oportunidad perfecta para presentarme. Por desgracia, no fue mucha la gente que asistió a clases, así que no hubo convivio.

Una vez inscrito en el nivel 5, me fui a sentar en las escaleras, fuera del lugar. Me puse a platicar con unas amigas mientras veía la forma de hablarle a Nohemí, pero pasaba el tiempo y yo nomás no me animaba.

Tenía ya media hora que estaba solo, mis amigas se habían ido y yo aún no me armaba de valor. Ella estaba platicando con la recepcionista del lugar.

Dieron las 8:30 y decidí irme, pero camino a mi carro, se me ocurrió una idea. Tomé un cuaderno y un lapicero, y empecé a escribirle una semi carta a Nohemí, le dije que me disculpara el tener que recurrir a ese medio, pero que era algo tímido, no tanto, pero con ella mucho.

También le dije que me gustaría mucho conocerla, que sabía que no tenía novio, pero aún así esperaba no le incomodara mi atrevimiento. Entre eso y otras cosas, le dejé mi teléfono, por si algún día quería compañía para ir al cine o algo.

Regresé corriendo y la encontré aún en la recepción, la saludé y le pedí que me regalara cinco segundos. Le entregué la “carta” y le pedí de favor que no la tirara, me despedí y salí apresuradamente, ella sólo sonrió.

En este momento son las 11:00 p.m., hace cinco minutos recibí un mensaje: Hola! Soy Nohemí, este es mi cel. Mañana salgo a las 2 del trabajo, si quieres me llamas para salir.

Estoy muy emocionado! Aunque también muy nervioso, diablos! Mañana va a ser un gran día. Ya escribiré al respecto…

(8) And if you have a minute why don't we go
Talk about it somewhere only we know?
This could be the end of everything
So why don't we go
Somewhere only we know? (8)

Somewhere only we know- Keane

Comentarios

Vicky ZR dijo…
Sí que lo yeah!!!

Que chido que te animaste!!!!

Saludines!
Ery Juarez dijo…
Excelente post... Que bueno que escribes...
Saluditos
jarxg dijo…
Odia el café. Bueno, nadie es perfecto.
Ekiriari Cross dijo…
oaaaa =D
años
sin
saber
de
ti

jo
jo
jo

awww.. el cafe ultimamente me da nauseas T_T y si me gutaaa!!! muxo muxo..

wueno, me voi.. tngo.. no se. me siento mal o.O y examen seee el lunes...

aiusin
hehehe

Ekita C.
No sé pero en tus letras noto algo de tristeza.... tal vez estoy loca.

Suerte con la chica, y sobre todo en cualquier cosa que hagas.

Saluditos!!
Vicky ZR dijo…
Pus como no hay nada nuevo no me queda de otra que seguir leyendo el mismo post.

En esta ocasión me llamó la atención aquello del nerviosismo que te provoca y me recordó unas palabras de un, no tan sabio pero a veces atinado amigo quien alguna vez me dijo: "para mí, la persona que te gusta debe ponerte nervioso"

El sábado que fui a visitar al novillo y lo vi caminando a recibirme, literalmente me temblaron las rodillas...

Me da harto gusto que estés tan enamorado, me da harto gusto que la hayas encontrado =)

Entradas más populares de este blog

Cerrando círculos.

All my loving...